Consecuencias de los movimientos y de los días 11

Pasados ya dos meses desde los terremotos, es cuando se van comprobando las verdaderas consecuencias de los movimientos telúricos. Ya no sólo los materiales, sino también los emocionales, afectivos o como han variados nuestras costumbres.

Una de esas consecuencias, es que la mitad de las figuras del belén municipal están ahora destruidas. Yo soy muy de belenes, y el que monta la asociación belenista de Lorca es impresionante. Este año, esa costumbre va a cambiar, por el estado de muchas de las figuras y porque el lugar donde se colocaba, el palacio de Guevara, se encuentra totalmente apuntalado.

Destruidas la mitad de las figuras del belén municipal

También nuestros hábitos diarios han tenido que cambiar. Y es que si bien antes teníamos 3 supermercados cerca y otro que iban a abrir, ahora no hay ninguno, todos tienen daños en los pilares y tardarán en abrir. La pizzería donde llevo yendo desde pequeño, también ha tenido que cerrar, y esperemos que sea momentáneamente. Una de las cervecerías irlandesas también ha tenido que cerrar, suerte que al menos queda otra abierta. La administración de lotería a la que iba, no sólo ha cerrado, el edificio donde estaba ha sido derribado. Y así muchas cosas que tardarán en volver a la normalidad.

Y luego esta lo de los derribos. Ver como derriban parte de tu pasado es duro, lugares en los que has vivido buenos y malos momentos, y que sepas que no es por gusto, es duro. Van a derribar el piso en el que vivieron mis abuelos paternos, el único que yo les conocí pese a ser el último. Era ya más que una tradición comer allí el día de año nuevo, con mis tíos comentando la noche anterior, y esos míticos saltos de esquí de fondo en la tele. Para comer… arroz, por supuesto. También derribaran la de los padres de un amigo, donde habíamos pasado tantos momentos. Y el instituto, como me jode que tengan que tirar el instituto. Ese edificio es más que un simple instituto, es donde entramos siendo unos críos y salimos siendo casi hombres, esos momentos de patio, las fiestas de navidad, la cantina (ese gran descubrimiento), esos profesores que aunque quieras no podrás olvidar, la mesa de pin-pon, los intercambios con alumnos extranjeros,… Demasiadas cosas.

Las máquinas comienzan a demoler el instituto Francisco Ros Giner

Pero no todas las cosas malas iban a pasar en día 11 (11-S de Nueva York, 11-M de Madrid, 11-M de Japón, 11-M de Lorca,…), también un día 11 de hace un año ocurrió lo que el 68% de la población española considera la alegría más grande de su vida, España por fin fue campeona del mundo de fútbol. De momento yo también me incluyo en ese 68%. Viva España, pijo.