Era difícil no incluir una canción de Mecano dentro de mi particular banda sonora, teniendo en cuenta que no es de mis grupos favoritos aunque me gusta. Pero forma parte de ella desde ese momento en el que se convierte en el primer grupo que has visto en directo en tu vida.
Esto ocurrió hace ya 31 años, un último viernes de feria (como hoy). Yo aún estaba en el colegio, y aunque al concierto iba a ir con mis padres y mis tíos era para fardar más que de sobra en clase. Muy muy pocos éramos los que íbamos a ir, ya que por nuestra edad aún era pronto para ir solos y más a la gira de moda en esos momentos. Mecano en su gira Descanso Dominical estaba arrasando y teniendo lleno tras lleno en sus conciertos, y aquí no iba a ser menos.
Todos querían ir a ese concierto, incluso aquellos a los que Mecano ni fu ni fa (como suele ocurrir con este tipo de cosas), y se formaron unas colas nunca vistas aquí para cualquier acontecimiento que se hubiera celebrado en esta ciudad. La Corredera estaba como si fuera Viernes Santo, pero con la única diferencia en que todos tenían el mismo punto en común.
El cartel del concierto se convirtió en objeto de fetiche, y eso que la mayoría que pudieron tenerlo era despegándolo de las paredes. Creo que llegué a tenerlo, de la misma forma evidentemente, como varios de los carteles de conciertos de esa época: La Frontera, Héroes del Silencio,… Y digo creo, porque era grande y no recuerdo tenerlo guardado por ningún sitio. Supongo que el tiempo, el estado en el que lo conseguiría ya en su momento, las mudanzas,… hicieron que pasara a mejor vida.
Del concierto apenas tengo recuerdos, flashes; de la entrada, de la cantidad de gente en un sitio tan “pequeño”, del inicio,… Y del mismo solo conservo la entrada y esos vagos recuerdos, de una noche de feria. Recuerdos que este año en el que no se ha podido celebrar por el ya consabido, parece que se evocan con más fuerza. Feliz No Feria.
